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Nos encontramos en el quinto y último curso del itinerario propuesto por la congregación de las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada. En el curso 2014-2015 experimentamos el valor de la FRATERNIDAD mediante la construcción en común de unos cimientos sólidos. En el 2015-2016 utilizamos esos cimientos como pista de despegue para poder volar muy alto escuchando nuestro corazón y el de los que están a nuestro alrededor, y llegar así a comprender el valor que tiene la ESPIRITUALIDAD. En el curso 2016-2017, observando el mundo desde el aire, nos vimos en la necesidad de pedir la mano a Jesús, para que nos transmitiera su amor por la vida y la justicia, por la paz y el bien, y nos concediera el punto de apoyo y la fortaleza para poder levantar ese mundo a través del valor de la SOLIDARIDAD.

En el pasado curso 2017-2018 nos enredamos en la MISIÓN de buscar la paz y hacer el bien en nuestros colegios, nuestras casas, nuestros barrios, pueblos o ciudades.

¡Enhorabuena! Ya disponemos de las herramientas necesarias para lanzarnos al espacio interior y dar el gran salto: descubrir y responder a los interrogantes ¿quiénes somos?, ¿quién soy?, ¿me conozco?, ¿cómo soy por dentro?, ¿cómo puedo ser más feliz?, ¿cuál es mi vocación?… todo ello animado por el lema del curso 2018-2019:

 

 MI ESTRELLA ES TU LUZ

 

Todos tenemos una estrella interior, que no solo hemos de descubrir, sino también darnos cuenta de para qué sirve. Puede ser que nuestra estrella esté apagada, no tenga luz, se encuentre escondida o no siempre resplandezca. Vamos a ponernos manos a la obra para lograr que brille lo más intensamente posible. Para ello debemos deshacernos de esas capas que impiden que salga nuestra luminosidad, esos agujeros negros que la absorben (egoísmo, individualismo, consumismo, miedo, conformismo…), para poder alumbrar con ella, nuestra luz (paz, bien, bondad, alegría, esperanza, solidaridad…), a los que nos rodean.

 

Estudiaremos la vocación de las Hermanas Franciscanas de la Inmaculada. ¿En cuántas misiones, las Hermanas Franciscanas han sido y siguen siendo estrellas que iluminan las oscuridades de los más necesitados? Esa «chispa» que Dios depositó en ellas se ha convertido en el deseo de una estrella fugaz gracias a su “SÍ”. Las Hermanas Franciscanas dicen “Mi estrella es tu luz” que significa “Mi vida es servirte” o “Mi vocación es la expansión de tu Amor”. ¿Quién no sueña y se sonríe al ver una estrella fugaz en la noche?

 

Dios nos anuncia: “Mi Estrella es tu Luz, mi Hijo es el que ilumina tu camino”. Jesús es nuestra luz para que nosotros podamos llegar a ser su luz en el mundo, luz en el colegio, en la familia, en la ciudad… Se trata de un acto de fe, de dejarnos guiar por la luz que ilumina el mejor camino que Dios tiene preparado para cada uno de nosotros, el camino que nos llevará al más alto grado de felicidad posible.

 

 ¿TE ATREVES A BRILLAR?

 

 

UNA CONSTELACIÓN EFI