En la misión compartida.
Durante este mes crearemos espacios para el conocimiento mutuo y para compartir experiencias
y testimonios. Debemos ser conscientes y despertar a la responsabilidad que tiene pertenecer a
una misión. Para ello nos dejaremos enredar por la red de Francisco. Él, cortando los cables del
poder, del egoísmo y del consumismo, supo conectarse a la WiFi gratuita de Dios y construir una
red para servir a los más pobres y necesitados. Descubriremos que estamos en una verdadera
misión cuando ésta es compartida, cuando tenemos metas comunes en las que cada persona de
la comunidad educativa puede enredarse libremente. La misión unipersonal no existe, para que
sea verdadera misión debe ser compartida, vivida y expandida. Nos fijaremos en la red social de
la misión compartida de San Francisco, su programación y propagación por todos los lugares del
mundo. ¿A qué red se conectó Francisco?